La automatización se vuelve cada vez más esencial para los fabricantes cada año. La manufactura destaca como una de las industrias más prevalentes y cruciales para la aplicación de la tecnología de automatización. La manufactura automatizada, la Industria 4.0 y otras soluciones de manufactura interconectadas están listas para ganar impulso a medida que las empresas buscan cada vez más maneras de aumentar la productividad y reducir costos. En este blog, nos sumergimos en la definición de la automatización en la fábrica, exploramos sus ventajas y explicamos cómo remodela diversas industrias.
Puedes determinar qué tipo de automatización es mejor para tu manufactura al observar varios ejemplos de procesos automatizados en la fabricación. Algunos de ellos se examinarán en esta sección.
Para la fabricación rápida de un solo estilo de producto, la automatización fija funciona mejor. Algunos ejemplos incluyen:
La automatización ideal para fabricantes que producen varios lotes de productos es la automatización programable. Algunos ejemplos son:
La forma más versátil de automatización es la automatización flexible, capaz de producir eficientemente diversos productos similares y manejar cambios sin problemas. Una excelente ilustración de la automatización flexible es un brazo robótico que se puede programar para realizar diversas operaciones como insertar tornillos, taladrar agujeros, lijar, soldar, insertar remaches y pintar con aerosol. Los fabricantes emplean robots industriales para diversos fines, incluyendo:
Industrias que Utilizan la Automatización en la Manufactura
La mayoría de las industrias utilizan extensivamente procesos de manufactura automatizados en la actualidad, pero las siguientes son aquellas en las que observamos el crecimiento más rápido:
La automatización en el sector del embalaje desempeña un papel crucial en la elevación de la seguridad de los trabajadores. Al automatizar diversos procesos, se reduce la intervención manual en tareas potencialmente peligrosas, minimizando el riesgo de accidentes y lesiones. Esta priorización de la seguridad crea un entorno de trabajo seguro para los empleados.
La automatización reduce significativamente el tiempo de producción, permitiendo a los fabricantes adaptarse rápidamente a los cambios del mercado. Esta velocidad aumentada no solo mejora la adaptabilidad, sino que también aumenta la competitividad. A través de la colaboración de la automatización y sensores sofisticados, los procedimientos de validación e inspección se completan eficientemente, asegurando el control de calidad y tasas de producción elevadas. Las máquinas, bajo la automatización, pueden fabricar más productos con menos defectos en un período de tiempo más corto, contribuyendo a una mayor eficiencia y productividad.
La reducción de errores humanos hace posible mejores productos y mayor seguridad. Las devoluciones, los costos de reparación y las lesiones significativas disminuyen. Introducir la opción de dirigir el capital humano hacia la investigación y desarrollo en lugar de actividades rutinarias también permite utilizar los recursos de manera más eficiente.
A diferencia de los trabajadores humanos, las máquinas tienen menos probabilidades de enfrentarse a escaseces. La tecnología de automatización aborda la brecha de habilidades y la escasez de mano de obra, lo que puede afectar significativamente la rentabilidad de una empresa manufacturera y su capacidad para mantenerse en el negocio.
Los datos pueden distribuirse eficientemente en toda la cadena de suministro y utilizarse para rastrear inventarios, mantenimiento del sistema y productos terminados a través de sensores, robótica y equipos sofisticados. Esto mejora la efectividad de la programación y planificación, permitiendo una toma de decisiones mejorada y aumentando la posibilidad de un mayor retorno de la inversión (ROI).
A pesar de los desafíos recientes, como la pandemia de COVID-19 y las subsiguientes interrupciones en la cadena de suministro, la escasez de mano de obra, el aumento de la inflación y los costos, se espera que el sector manufacturero experimente un crecimiento en 2023.
La industria está preparada para mantenerse robusta a medida que varias tendencias ganan impulso, incluida la proliferación de la tecnología, la integración de la inteligencia artificial (IA) y la utilización de productos “inteligentes”. Estos patrones emergentes son cruciales para seguir de cerca en el próximo año.
A medida que la inteligencia de la robótica sigue avanzando, su capacidad para realizar operaciones intrincadas de manera rápida, eficiente, más confiable y con menos riesgo se vuelve invaluable para el sector manufacturero. Dado el ritmo actual del avance tecnológico, el futuro de la automatización en la manufactura parece prometedor.
Mirando hacia adelante, la trayectoria de la automatización de fábricas sugiere un aumento sustancial en la aplicación y desarrollo de:
Estos, junto con tecnologías adicionales de producción digital, contribuyen a un mayor control sobre el taller de producción, marcando un cambio transformador en el panorama manufacturero.
Contrario a la creencia popular, la fabricación de maquinaria de automatización no reemplazará pronto la mano de obra; la mayoría de los procesos aún requieren intervención humana, ya que las personas son más flexibles y creativas. Su proceso de reentrenamiento puede completarse más rápidamente que la reprogramación y el ensamblaje de un robot.
Es crucial reconocer que la automatización no siempre tiene la intención de reemplazar empleos; en cambio, puede llevar a cambios en los roles laborales. Ahora, las personas pueden emplearse de manera más efectiva en profesiones que se centran en la resolución de problemas, la creatividad, la gestión de personas y la innovación, y que son más seguras y menos físicamente exigentes que las tareas que podrían plantear riesgos ergonómicos y de seguridad.
Incorporar herramientas de automatización en la estrategia de transformación digital permite a los fabricantes mejorar diversos aspectos de sus operaciones comerciales. El viaje hacia la automatización puede comenzar con tareas básicas como la programación y la recopilación de datos, evolucionando para abarcar la automatización de procedimientos a lo largo del ciclo de vida del producto.
Estos procedimientos comerciales automatizados mejoran la eficiencia operativa y contribuyen a los esfuerzos destinados a automatizar la producción. La integración de tecnologías de automatización y soluciones de ERP para manufactura puede provocar un cambio significativo en las operaciones diarias de una empresa.
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